El Pesa-nervios
COMEDIA PARA EXTRATERRESTRES
Pablo Krantz es una persona (¿una persona?) de esas con las que no se puede mantener un diálogo serio durante más de 30 segundos. Por eso (y más allá de mi erectante inexperiencia periodística) creo que esta serie de frases que siguen a continuación mientras se pelean por denominarse reportaje, harán que más de uno medite entre otras cosas, sobre si es conveniente dormir más de 6 horas diarias.
Según palabras del ex-Krisis, este compendio de “lecciones de vida” se divide en dos partes: "en una soy una persona seria que dice todas reflexiones muy profundas acerca de Dios, la poesía, el mensaje y el amor, y en el otro cuento pavadas acerca de Patoruzú”.
Con ustedes la nota (aviso: presentando esta página obtenés 8 horas gratis de psicoanálisis en el consultorio de los superamigos)…
¿Qué hicieron el año pasado?
Tocamos en septiembre en el Rojas y después tuvimos otras fechas más en otros lugares.
¿Cómo es esto del Rojas?
Es un ciclo que organiza un pibe que conozco que está juntando a bandas… no sé si llamarlas alternativas o poco conocidas.
¿Qué significa alternativo?
El problema del rock es que tradujeron la palabra, es como decir thrash. Si acá lo hubieran traducido como basura hubiese sido una discusión acerca de si realmente hacen basura o no, y sería decir una ridiculez. Alternativo es un nombre que pusieron, como punk, que quiere decir parásito. ¿Son o no son parásitos los Sex Pistols? Es una pregunta ridícula; una cosa es que sea algo no convencional, y otra que se parezca a Pearl Jam.
Otros planes… Estamos viendo de grabar algo más aparte de lo que salió en el compilado de Plot! No sé si lo vamos a editar en cassette o CD. También pensamos grabar un video pero no sé que va a pasar.
Hacé una breve reseña de la historia de El Pesa-nervios…
Empezó en el ’89. A principios del ’90 tocamos por primera vez con ese nombre en una reserva ecológica por Acasusso y la música y los integrantes, salvo yo, cambiaron completamente. En un principio hacíamos noise al estilo Velvet Underground, Sonic Youth, Joy Division, Stooges, Birthday Party; ahora estamos haciendo otra cosa más en el estilo de “canciones”. No es que eso se diferencie demasiado de la Velvet.
¿Es más digerible?
No es que sea más digerible, o sea, antes hacíamos una base que se repetía por ahí durante ocho minutos sobre la cual venía una improvisación, ahora no, ahora es una canción. Además el sonido es distinto, en esa época había mucha distorsión, mucho griterío.
¿A qué le atribuís esta mutación de la formación?
A haber comenzado el grupo con mis amigos, y después llegó un punto en el cual estas personas por ahí no estaban lo bastante dispuestas a hacer todo lo que hay que hacer, o sea, llegado un cierto punto si uno quiere ser profesional representa un cierto sacrificio, un cierto trabajo. La gente por ahí pensaba… no sé… rock, rock, rock.
¿Para qué tocás?
Son muchísimas las razones… es como preguntarse por qué te gustan las mujeres. No es porque tienen los ojos azules o tienen bonitas caderas… son 5.000 cosas que pasan por muchos aspectos más banales o menos banales, entonces tener un grupo no es tan solo una cuestión de expresarse, sino de miles de otras cosas. Crear algo a partir de la vida, de la gente; tratar de hacer algo real y al mismo tiempo profundo. Algo que no sea nada más que comer y cagar.
¿Cuáles son las cosas que detonan en tu cabeza a la hora de crear?
Yo no trato de caer en lo personal, que es lo que hace la mayoría de los grupos, o sea, una persona habla en un lenguaje que entiende solo él hablando de cosas que se le ocurren solo a él, como queriendo mostrar su personalidad. Para mí está bien que la persona lo haga pero no sé si tiene mucho sentido que lo muestre; no es un artista, la cuestión es tratar de hacer algo en lo que se pueda encontrar todo el mundo.
¿Algo más comprensible masivamente?
Claro, algo que además se pueda entender. El gran defecto de los letristas argentinos es que no se les entiende nada. No sé, juntan palabras; por ahí no tienen sentido y ni siquiera tienen que tenerlo. Todo el mundo tiene derecho a hacer lo que quiera pero… no sé, a mí no me gusta…
A veces en los shows de El Pesa-nervios se pueden ver bailarinas…
En general casi todas las ideas tienen un origen casual, por lo menos en nuestro caso. Conocíamos a unas chicas que bailaban y bueno, quedaba bien. Además es algo muy hermoso estar tocando y que alguien al mismo tiempo esté bailando; eso también se da supongo que en el hardcore, de otra manera. Es ver al mismo tiempo cómo la música entra en las personas y crea algo en ellas.
¿Qué hay en las letras de El Pesa-nervios?
Yo trato de que en ellas haya todo lo que hay en la vida, tanto dolor como alegría; por ahí uno se vé más llevando a… es decir, cuando uno está alegre uno está alegre y listo, en cambio cuando uno está dolido o herido tiene más tendencia a escribir. Las canciones de la edad media solían tener letras muy tremendas en las que se morían todos los personajes, y cuando terminaban venía siempre un estribillo medio cómico para que todos en la taberna terminaran cantando felices.
¿Qué es la comida?
Supongo que la comida debería ser como un ritual en el cual uno come de una manera tranquila y piensa en la energía que tendrá o en los animales que mataron para que uno coma… o en el gran Dios que nos da el milagro de comer, pero yo en general siempre pienso que comer es perder el tiempo, por eso como muy rápido.
Habláme de Dios…
Es una pregunta que para mí es imposible de contestar. Por un lado porque lo que uno llegue a sentir acerca de Dios no se va a poder decir con palabras, y por otro porque a ciencia cierta no tengo la menor idea.
¿Qué te interesa conocer de los grupos que te gustan?
En general me interesa saber de sus vidas o de lo que piensan sobre la vida, pero no me interesan demasiado los detalles como saber si usan una guitarra tal o cual o si les gusta comer cereales o tomar cerveza.
¿Qué pensás sobre la vida?
Que es algo… que es un milagro que estemos acá. O sea, estamos acá pero en realidad podríamos no estar. Cada minuto que estamos acá es como, por más que la vida sea difícil, algo fantástico. Además supongo que la vida también consiste en tratar de avanzar a partir de lo que uno es y no terminar queriendo a los 50 años lo que uno quería cuando tenía 5, o no terminar sin aprender nada.
Hay gente que no aprende nada…
Sí, sobre todo ahora con la televisión y todas las cosas. La gente tiene cada vez menos oportunidades de estar junto a sí misma y cada vez sale menos. Si todo estuviera bien y no nos fueramos a morir, estaría muy bien entretenerse durante la eternidad y mirar televisión, pero en realidad nos vamos a morir y eso hace que uno tenga que ir conociéndose a sí mismo, porque supongo que cuando uno se muera va a verse enfrentado a cosas fuera de lo común, aunque sean gusanos o ángeles, no sé, pero es raro. Además el tiempo que tenemos es muy poco como para perderlo.
¿Qué hacés para que las pocas ganas de crecer que tiene la gente no te contagien?
No es que tengan pocas ganas, tampoco poca capacidad, es sencillamente que el hombre es una persona que se olvida todo el tiempo, yo también. Uno se olvida de todo, de qué está haciendo, de quién es, de para qué lo hace, y siempre termina comportándose por inercia; y más si uno está metido en un montón de cosas que lo llevan de acá para allá. Yo no creo que la gente no aprenda nada, todo el mundo aprende… o sea, ¿quién es el que más sabe? Yo por ahí no sé nada, por ahí lo único que tengo es la habilidad con las palabras. Creo que era Rilke el que decía que la gente va acumulando vida y montones de cosas, y esas cosas son las que después tienen que llegar al poeta y ponerlas en palabras. Pero no es que el poeta sepa más que los demás… yo no sé si soy poeta o no, en todo caso lo que yo creo que sería ser poeta es tener esa habilidad y ese don de poder tomar las cosas de la gente y hacer algo con eso.
Hablame de tu infancia…
Yo tengo un recuerdo en sí feliz de mi infancia, pero tal vez fue media extraña. Me acuerdo que era un niño demasiado lógico, todo lo quería resolver con la lógica. Tenía insomnio por las noches, ya cuando tenía 5 o 6 años, y pensaba que la única manera de dormirme era contarme los sueños que había tenido; entonces me empezaba a contar los sueños durante horas. Al final me terminaba durmiendo, supongo que por cansancio… pero me quedaba así, completamente tapado y pensaba que la sábana me protegería de cualquier asesino que llegara y que podría estar ahí, contándome historias toda mi vida, y en general los niños se imaginan que son grandes héroes. Yo siempre pensaba que me codeaba con los héroes, pero nunca me tomaba mucho como héroe.
¿Qué héroes se codeaban con vos?
Y… qué se yo… desde los superamigos hasta héroes desconocidos por el gran público.
¿Y cómo es que te aceptaban entre ellos?
Se daban cuenta de que yo, a pesar de no tener superpoderes, tenía alguna cualidad desconocida que hacía que ellos me aceptaran.
¿Fuiste a alguna reunión, o siempre telepáticamente?
¡No! ¡¡Pero yo no me lo creía realmente!! Era como que una parte de mí se lo contaba a la otra, pero no es que uno puede dividirse en partes y pensar que una está loca y la otra está sana, y que a una le gusta jugar al fútbol y a la otra no.
¿Qué opinás de esos grupos que cantan todo el tiempo como si fueran pequeños, de esa postura del anti-crecimiento?
Yo creo que está bien ser niño cuando se es niño y adulto cuando se es adulto. Cada cosa tiene su tiempo y si no uno se transforma en un viejo verde queriendo tener las mujeres que no tuvo cuando era chico. Yo no me voy a poner a decir si lo que hace la gente está bien o mal porque es una cuestión de cada uno, por ahí el problema es que muchas veces las personas tienen una adolescencia difícil y una juventud complicada; entonces piensan en la niñez como el paraíso perdido… y tal vez sea el paraíso perdido, pero bueno, se trata de seguir el camino que por ahí uno interrumpió cuando empezaron todos los problemas de la adolescencia. Uno tiene que dejar que su cuerpo cambie porque igual, aunque no lo quiera, uno va a cambiar. Se supone que los sabios siguen al destino y que los necios se dejan arrastrar por él, o sea, las cosas van de una manera que uno no puede controlar. Cuando uno tiene 25 y todavía cara de niño está todo bien con fingir ser niño, pero después se hace complicado, ya nadie te lo cree.
¿Qué pensás cuando ves un anciano?
Y… a veces uno tiene miedo de hacerse viejo, pero lo peor de todo es hacerse viejo sin haber hecho nada. Tratar de no levantarse a los 72 las mujeres que uno no tuvo a los 21.
¿Recordás el primer cassette que te compraste?
Me lo compré a los 5 años, era de Pipo Pescador. A los 13 años me encantaba el heavy metal, después a los 15 el blues, y quería formar una banda de blues.
Hablá de la variedad de caras de las personas…
Yo pensaba siempre que todas las personas estaban en el mundo para que algún día se lograran las combinaciones de todas las caras posibles. Entonces las miraba y trataba de recordarlas para que figuraran de extras en mis sueños.
¿Alguna llegó a convertirse en superhéroe?
¿Qué?
Si alguna de estas personas llegó a codearse con vos pero no como extra sino como superhéroe…
No, no, pero yo ahora te estoy hablando de otra edad… 15 o 16 años.
¿Hasta qué edad fue lo de la patología de los superhéroes?
Y… cuando era un niño… un momento…
LLEGA FLORENCIA (EX MATA VIOLETA, TAMBIEN CONOCIDA COMO FLOPA) Y SE SUMA AL REPORTAJE
F:¿Le contaste algo sobre Krisis?
P: Krisis era mi grupo de cuando tenía 9 años; eramos un vecino de mi misma edad y yo. Teníamos la guitarra que era del hermano mayor de él y nos sentabamos uno a cada extremo de la mesa y hacíamos una letra. Después agarrábamos la guitarra y como no sabíamos los acordes, tocábamos de cualquier manera y cantábamos.
¿Recordás alguna letra de Krisis?
P: La primer letra que escribí en mi vida era un tango y se llamaba Julia… el estribillo decía “Julia, ¿por qué me dejaste y me diste esta puntada tan certera al corazón?”.
F: Después había también cassettes de chistes…
P: Ah! En realidad antes de esto y de que le pusieramos el nombre Krisis (que lo sacamos de una revista soviética de cosmonautas que no sé de dónde había salido, soviética pero en castellano, esas de difusión comunista) grabamos dos cassettes. En uno contábamos anécdotas gauchezcas gritando todo el tiempo HUIJA y CANEJO, porque leíamos todo el tiempo Patoruzú. Después grabamos otro que se llamaba RUIDOS DE GUERRA, y eran todas cosas de matracas, ruidos de caballos, disparos y gritos como “HUY, ME MUERO!!!”.
¿Qué pasó con ese material? ¿Los fans de El Pesa-nervios pueden adquirirlo?
P: Primero lo tuvieron nuestros respectivos padres, pero creo que por miedo a que se los hicieramos escuchar otra vez los habrán desgrabado.
Seguramente tenés alguna perlilla escolar…
P: Cuando tenía 16 años hicimos un recital en mi colegio con un grupo que se llamaba Los Piscodélicos. Me acuerdo que antes de comenzar el recital leí la dedicatoria del libro EL ELIOGABALO de Artaud, en el cual dedicaba su obra a la anarquía y otras cosas. Todavía tengo la grabación en la cual yo digo eso y se escucha cerca del grabador una voz maquiavélica que dice… ah!!! La anarquía!!! (risas)
DORIAN (BATERISTA DEL GRUPO) TAMBIEN TIENE INQUIETUDES, Y MIENTRAS ACARICIA UN PERRO NOS DICE…
D: Como generalmente la gente es tan mierda, lo único inocente bueno son los animales, que no saben lo que es bueno y lo que es malo…
¿Y por qué hay perros policías?
D: Pero no son malos, los hacen malos.
P: Y bueno, lo mismo se podría decir de las personas…
D: Pero las personas pueden decidir por sí mismas, los perros no.
P: Hasta cierto punto.
D: Yo conozco gente que dice “voy a ser policía porque no te piden nada y encima te pagan”.
Pero quizás los bebés cuando nacien tienen la misma mentalidad que los perros, o sea, después se educan…
D: No, pero dicen lo psicólogos que apenas nacen es como que no son conscientes pero tienen que ir viendo como van a ser en el futuro, el carácter y todo eso.
Quizás los perros también sepan y puedan optar por ser policías o no… D: No sé si saben, no sé si es en blanco y negro o en color.
P: En cuantas dimensiones, qué programación… (risas)
F: Como los caballos, que ven para los costados, pero ¿cómo hacen para ver para adelante?
D: Es que si es por eso también tenés que decir… vos ves recto.
F: Pero el caballo es distinto, porque tiene los ojos de costado.
D: ¡Pero tiene un punto de unión!
P: ¡Bueno bueno, hacé una pregunta Gato!
¿Cuál es tu estación del año favorita?
P: Las quiero a todas por igual.
¿Cuál es tu color favorito?
P: Los quiero a todos por igual…
LUEGO DE DOS PREGUNTAS ABSOLUTAMENTE NEFASTAS, PABLO SE DEDICO A BRINDARME EN FORMA GRATUITA SU CURSO DE PERIODISMO PARA PRINCIPIANTES…
P: Vos tenés que buscar lo que les interesa a los lectores, tenés que atacar los puntos bajos diciendo cosas como…
F: ¿Es verdad tu reputación de homosexual?
P: ¡No!, eso por ejemplo no; eso no lo preguntés porque podés llegar a ligar una trompada, sobre todo porque sos periodista alternativo y no tenés poder. Si fueras de Clarín tendría que decirte simplemente no, pero no pongas lo de Clarín, a ver si todavía quedamos mal…
F: En realidad debería ser al revés, a los periodistas de revistas alternativas hay que contestarles bien y a los otros hay que contestarles mal.
P: Bueno, pero una cosa es contestarles mal y otra cosa es pegarles una trompada. Si Gato me dijera “¿es cierta tu reputación de homosexual?” yo por ahí no le pegaría porque ya lo conozco, en cambio si te lo pregunta uno de Clarín… lo negás y nada más.
F: Es verdad que te vieron en Michelangelo con… (risas)
P: Bueno bueno, volvamos a la parte seria…
¿Qué es el amor?
P: Bueno, hay una canción que dice así: “Aprendí cosas sobre el amor, acerca de cuán errado podés estar, de cuán hermoso podría ser todo si todo nos saliera mal al final, pero al final me doy cuenta de que pasé por el sueño y la compasión y aprendí a soportar la calma y la tormenta, pero todavía no sé nada del amor”, ahí terminó.
ESPACIO DE SILENCIO…
P: Bueno, dale. Hacé preguntas, vos tenés que ser una máquina de preguntar y yo una máquina de responder, entonces el reportaje será un éxito.
Habláme de tu infancia…
P: … largo de mi privacidad, maldito periodista amateur!!!
ESPACIO DE SILENCIO
P: Lo que pasa es que muchas veces en los reportajes a bandas les gusta decir cosas como “sí sí, ahora estamos a nivel competitivo y logrando no sé qué cosa” y decir todas cosas de una manera exitista. Yo tengo una tendencia a decir todo de manera derrotista, entonces prefiero no contestar esas preguntas… hasta que me las hagas (risas), o sea, muchas veces las bandas van y empiezan a decir “claro, porque ahora tenemos unas ideas muy interesantes para lograr un nuevo disco y el EP, un sonido realmente innovador dentro del panorama mundial”, y lo escuchás y decís que están haciendo a los Red Hot Chili Peppers.
Bueno Pablo ¿cómo está el poder en la Argentina en este momento?
P: Las cosas están mal pero siempre estuvieron mal, no es ninguna novedad.
Alguien dijo que la gente se queja de que está todo mal, pero si ves los edificios de la DGI, están superterminados, y les chorrea el mármol por todos lados, o sea que la verdadera violencia de las cosas está en la calle, a la vista de todos, y a lo mejor la gente no reacciona con eso…
P: Para mí los problemas son realmente muy muy serios y muy muy graves, y no creo que se pueda cambiar mucho porque el orden no es una cuestión de la Argentina, es una cuestión del mundo que está hecho de cierta manera en la que unos tienen todo y otros no tienen nada. Y es también una máquina que ya está en funcionamiento y que está basada en ciertas ideas como el dinero, la comodidad, el entretenimiento, la esclavitud y cosas así, encubiertas. Pero es una máquina que ya está andando como loca.
¿No se la va a poder parar?
P: No sé, Jello Biafra decía que un verdadero cambio no es estar frente a la tv y hacer zapping; no podés cambiar así. El mundo está cada vez más contaminado, o sea, no sé cuántos años quedarán. Ponéle, el agua está tan contaminada que ya solo se puede tomar el agua que hacen los del sistema, o sea que si vos ahora te querés hacer el loco y te vas a vivir a no sé donde vas a tener que tener una canilla y esto y aquello. Las cosas ya marchan de una manera y el cambio sería muy lento, sería un cambio de la gente y no sé si hay tiempo ni si se puede hacer. La verdad es que no soy muy optimista. Cuando era más chico estaba en el movimiento anarquista y cosas por el estilo, y hoy en día ya no veo las cosas de esa manera. Tal vez sea por un exceso de política en ese tiempo, pero ahora no lo veo muy así, no veo las cosas de una manera política… bah, todo es político en sí, pero no es una cuestión de que se muera Menem o Cavallo… o que se muera… ¿cómo se llama el presidente de los EE.UU.?… Clinton!, no es una cuestión de que se muera uno o el otro. Las cosas ya están armadas de una manera y si vos querés detener todo eso y, si pudieras hacerlo, imagináte que hubiera una revolución salvaje y que murieran, sería algo terrible. Además no se puede hacer… no sería una cuestión tan sencilla…
¿Y por dónde vendría la mano? ¿Qué bajen los extraterrestres?
P: No, yo en realidad no lo sé. Pienso que lo más probable es que dentro de 100 o 200 años no quede nada.
¿La televisión es un medio decisivo?
P: Yo nunca miro televisión, me parece que hace daño al cerebro, pero hay gente que dice que le gusta relajarse y ver televisión.
¿Y entonces de dónde sacaste a los superamigos?
P: Bueno, cuando era niño miraba televisión, pero en esa época no tenía una libertad de pensamiento como para… o sea, en ese momento quería lo que todo niño, entretenimiento, y cuanto más entretenimiento mejor.
¿Qué quiere decir? ¿Qué los superamigos se convirtieron en parte del poder político y por eso ya no soñás más con ellos? ¿Qué pasa si a tus 25 años soñás con ellos nuevamente?
P: De hecho a veces me sucede que tengo los mismos sueños que tenía antes, pero el problema es que ya sé que los tuve y los voy viendo y digo “¡ah!, ¡ahora va a pasar tal cosa!”. Y sé todo lo que va a pasar. El problema viene cuando empiezo a dudar. Hay un momento en el que dudás y las cosas comienzan a ponerse… es como cuando vos sabés que vas a dar un paso en el agua y que cuando lo hagas el agua va a empezar a hacer círculos alrededor de tu pié, pero vos tenés miedo de que antes de que des el paso el agua empiece a hacer el círculo. Es un miedo así, a no llegar a tiempo. Tambiéntuve otro sueño cuando era chico en el que venía un león a mi casa y empezaba a comérsela toda. El tipo se comía las paredes, todo… y con mi familia nos ibamos refugiando en una habitación cada vez más lejana, y al final estábamos en una y no podíamos escapar. Entonces yo agarraba una espada y lo mataba. Cuando tenía 16 años volví a soñar lo mismo pero no estaba mi familia, sino que estaba rodeado por un montón de gente del ambiente del rock, y llegaba el león y se empezaba a comer la casa… y salían todos corriendo, salvo uno que estaba borracho… y el león se lo comía y ¡¡lo despedazaba!!! Y todos estábamos muy asustados. Venía gente de todo el mundo a refugiarse en esa habitación, que era la única que quedaba porque el león se estaba comiendo todo el mundo y nadie sabía qué hacer, y yo me acordaba y decía “yo ya tuve este sueño, hay una manera de solucionar esto, algo que se pueda hacer”, pero no se me ocurría. O sea, no se me ocurría agarrar una espada y matar al león; yo pensaba un discurso lógico por medio del cual ir al león y decirle “está mal lo que usted está haciendo (risas), no se puede estar comiendo las casas de la gente”… quería hacer algo así pero no tenía sentido, porque cuando tenés un león ahí lo único que podés hacer es matarlo o escaparte, pero no ir a convencerlo de que no sea un león. Después venía mi padre pero era un fantasma (mi papá no está muerto pero igual era un fantasma)… y venía y me daba enseñanzas que no me había dado nunca. Y yo trataba de entenderlas y venía toda la gente del rock y se reían y decían pavadas, y no dejaban que yo escucháse a mi papá. O sea, mi padre me estaba dando consejos acerca de cómo comportarse en la vida o de cómo era la vida, y estos venían y se reían… y no es que fueran locos, sino que eran decididamente bobos. Lo peor es que después tuve una novia que tuvo el mismo sueño, y el león venía y ella lo agarraba y se transformaba en un gatito.
¿Esto es cierto? (risas)
P: Sí, es que yo tengo 5 sueños por noche más o menos.
ESPACIO DE SILENCIO
P: Ponéle, ahora nos estamos divirtiendo, pero en otro momento no vamos a estar más acá, y todo esto va a desaparecer. Yo era chico y eso me parecía imposible, pensaba que había gente de otro planeta mirándonos. Estaban mirando tv todo el día… entonces imagináte una familia de extraterrestres que está cenando eternamente viendo tv, mirándonos a nosotros. Yo creía que cada familia de extraterrestres tenía asignada una familia terrícola. Había programas entretenidos y programas que aburrían, pero yo consideraba que hacía un programa entretenido (risas). Cuando se me ocurría un chiste gracioso lo contaba mirando el techo, pensando que le causaría alegría a la familia extraterrestre (risas). Tenía 5 años.
¿No tuviste oportunidad de conocerlos?
P: No, es que era algo muy teórico, lo pensaba sencillamente porque estaba cerca de descubrir que uno un día se muere.
¿Fuiste a un psicólogo alguna vez?
P: En realidad no tiene importancia la historia. Es graciosa, pero la cuestión es que es difícil vivir aún sin que haya algo más que el instante, que es una de las cosas que hace que el mundo esté llegando a su destrucción. No hay nada que haga que uno se sienta seguro, que las cosas puedan durar. Cada vez hay una razón distinta. No podés decir “yo escribo porque quiero conquistar a esa señorita” o “porque me siento muy contento”. De todos modos yo empecé a escribir de muy chico y nunca dejé de hacerlo. Es también lo que me pasaba cuando estaba con los héroes en mis sueños. Creía que era un héroe, pero yo era el que contaba la historia, no pensaba que yo era el que tomaba una ciudad, sino que era el que contaba como lo hacían. O sea que por ahí, de golpe, pasaba alguien por delante de mí y le daba un golpe. O cuando iban a matar (risas) a uno de los capitanes. Nunca fui un héroe, siempre lo sentí así. A mi lo que me pasa es algo muy extraño, ahora no tanto, pero hace muchos años yo soñaba con Bs.As., todos mis sueños pasaban por acá, pero cada zona tenía como una personalidad, un matiz muy particular, un estado de ánimo. Las calles daban miles de vueltas. Me acuerdo que Barrancas era una barranca de diez cuadras llenas de mendigos, y cada vez que tenía que atravesarla lo hacía corriendo, porque los mendigos se lanzaban sobre mí y trataban de robarme (risas).
¿Nunca tuviste un sueño normal?
P: A veces lo peor son los sueños agradables, porque te despertás y decís “¡uh! ¡Era un sueño!” y hacés una canción o un cuento… o nada, pero decís “ya pasó”. En cambio cuando es un sueño fantástico en el que una chica está con vos cuando te despertás es un bajón…
Bueno, pero con el león en tu casa te despertás agitado…
P: Depende, cuando matás al león te despertás contento, en cambio cuando dejás que el león haga trizas todo y tratás de convencerlo de que sea caritativo (risas)…
¿Cuál es el león de la realidad?
P: y… son muchos. Demasiados los leones que amenazan nuestra casa.
ESPACIO DE SILENCIO
P: Preguntáme cosas banales, porque sino la gente va a decir tonterías, como aquel popular “que va a ser famoso si vive a la vuelta de mi casa”. Una vez estuve en una radio muy famosa y a un tipo le hacían preguntas como “¿es bueno este disco de James Brown?”, y él decía “sí, lo escuché cuando tenía tres años”, y todo el mundo decía “¡¡¡uh!!!, ¡¡este guitarrista escuchó a James Brown cuando tenía 3 años, caramba!!”. Entonces se complica porque la fama y la presión de los demás se meterán a cada rato en las preguntas que me hagas. Por ahí sería mejor que pusieras el reportaje como que encontraste a alguien por la calle y se lo hiciste, entonces todos van a decir “¡¡¡éste está loco!!!” o “¡¡¡mirá éste las cosas que dice!!!”. Algo interesante podría ser que hay letras que las soñé y cuando me desperté las anoté. Por ahí tu creación a partir de una casualidad tan grande como es un sueño se va más allá de lo que vos querías, creo que de eso se trata el crear algo, como el famoso caso de los escritores perseguidos por sus personajes. Llega un momento en el que tenés que ir detrás de tus creacionies como si fueras una especie de cronista. El mayor problema que tengo cuando me pongo a escribir una novela es que pierdo el control de los personajes. Ellos van a donde ellos quieren y terminan haciendo cosas absurdas. Mi última novela se trata de…
EN ESTE MOMENTO PABLO ME CUENTA SOBRE UNA NOVELA MUY ABURRIDA QUE TRANSCURRE EN EL DESIERTO…
¿Se trata de Sheik, la novela del 13?
P: Lo que acabás de decir es una auténtica pelotudez, te merecés esto (sopapo mal colocado para suerte del amateur cronista y de sus futuras novias). Ahí está la diferencia. Si vos me conocieras a mí porque yo fuera amigo de los grandes, o no te hubiera dado pié a que me hagas bromas, yo te hubiera contado esto y vos dirías “¡caramba!, ¡¡¡que novela tan interesante!!!”. En cambio en este momento te permitís hacerme ese chiste. Realmente me siento muy decepcionado (risas) creo que esto ha sido todo.
Formación de El Pesa-nervios
Karate-slam: bajo
Dorian Mori: batería y percusión
Pablo Krantz (visitá su sitio web) : guitarra y voz
Invitados
Titán Aguer: acordeón
Carolina: teclados
Luis Moeawsky: guitarra y coros
Fidel Araujo: hombre-caballo y coros
escuchá > NINGUN CAMINO A CASA
Grabado en estudios 440, Cap. Fed. en 1995
Batería: Tati Carreras
Bajo y coros: Luis Morawski
Acordeón y coros: Titán Aguer
Guitarra y voz: Pablo Krantz
Compuesto por Pablo Krantz
Pablo Krantz es una persona (¿una persona?) de esas con las que no se puede mantener un diálogo serio durante más de 30 segundos. Por eso (y más allá de mi erectante inexperiencia periodística) creo que esta serie de frases que siguen a continuación mientras se pelean por denominarse reportaje, harán que más de uno medite entre otras cosas, sobre si es conveniente dormir más de 6 horas diarias.
Según palabras del ex-Krisis, este compendio de “lecciones de vida” se divide en dos partes: "en una soy una persona seria que dice todas reflexiones muy profundas acerca de Dios, la poesía, el mensaje y el amor, y en el otro cuento pavadas acerca de Patoruzú”.
Con ustedes la nota (aviso: presentando esta página obtenés 8 horas gratis de psicoanálisis en el consultorio de los superamigos)…
¿Qué hicieron el año pasado?
Tocamos en septiembre en el Rojas y después tuvimos otras fechas más en otros lugares.
¿Cómo es esto del Rojas?
Es un ciclo que organiza un pibe que conozco que está juntando a bandas… no sé si llamarlas alternativas o poco conocidas.
¿Qué significa alternativo?
El problema del rock es que tradujeron la palabra, es como decir thrash. Si acá lo hubieran traducido como basura hubiese sido una discusión acerca de si realmente hacen basura o no, y sería decir una ridiculez. Alternativo es un nombre que pusieron, como punk, que quiere decir parásito. ¿Son o no son parásitos los Sex Pistols? Es una pregunta ridícula; una cosa es que sea algo no convencional, y otra que se parezca a Pearl Jam.
Otros planes… Estamos viendo de grabar algo más aparte de lo que salió en el compilado de Plot! No sé si lo vamos a editar en cassette o CD. También pensamos grabar un video pero no sé que va a pasar.
Hacé una breve reseña de la historia de El Pesa-nervios…
Empezó en el ’89. A principios del ’90 tocamos por primera vez con ese nombre en una reserva ecológica por Acasusso y la música y los integrantes, salvo yo, cambiaron completamente. En un principio hacíamos noise al estilo Velvet Underground, Sonic Youth, Joy Division, Stooges, Birthday Party; ahora estamos haciendo otra cosa más en el estilo de “canciones”. No es que eso se diferencie demasiado de la Velvet.
¿Es más digerible?
No es que sea más digerible, o sea, antes hacíamos una base que se repetía por ahí durante ocho minutos sobre la cual venía una improvisación, ahora no, ahora es una canción. Además el sonido es distinto, en esa época había mucha distorsión, mucho griterío.
¿A qué le atribuís esta mutación de la formación?
A haber comenzado el grupo con mis amigos, y después llegó un punto en el cual estas personas por ahí no estaban lo bastante dispuestas a hacer todo lo que hay que hacer, o sea, llegado un cierto punto si uno quiere ser profesional representa un cierto sacrificio, un cierto trabajo. La gente por ahí pensaba… no sé… rock, rock, rock.
¿Para qué tocás?
Son muchísimas las razones… es como preguntarse por qué te gustan las mujeres. No es porque tienen los ojos azules o tienen bonitas caderas… son 5.000 cosas que pasan por muchos aspectos más banales o menos banales, entonces tener un grupo no es tan solo una cuestión de expresarse, sino de miles de otras cosas. Crear algo a partir de la vida, de la gente; tratar de hacer algo real y al mismo tiempo profundo. Algo que no sea nada más que comer y cagar.
¿Cuáles son las cosas que detonan en tu cabeza a la hora de crear?
Yo no trato de caer en lo personal, que es lo que hace la mayoría de los grupos, o sea, una persona habla en un lenguaje que entiende solo él hablando de cosas que se le ocurren solo a él, como queriendo mostrar su personalidad. Para mí está bien que la persona lo haga pero no sé si tiene mucho sentido que lo muestre; no es un artista, la cuestión es tratar de hacer algo en lo que se pueda encontrar todo el mundo.
¿Algo más comprensible masivamente?
Claro, algo que además se pueda entender. El gran defecto de los letristas argentinos es que no se les entiende nada. No sé, juntan palabras; por ahí no tienen sentido y ni siquiera tienen que tenerlo. Todo el mundo tiene derecho a hacer lo que quiera pero… no sé, a mí no me gusta…
A veces en los shows de El Pesa-nervios se pueden ver bailarinas…
En general casi todas las ideas tienen un origen casual, por lo menos en nuestro caso. Conocíamos a unas chicas que bailaban y bueno, quedaba bien. Además es algo muy hermoso estar tocando y que alguien al mismo tiempo esté bailando; eso también se da supongo que en el hardcore, de otra manera. Es ver al mismo tiempo cómo la música entra en las personas y crea algo en ellas.
¿Qué hay en las letras de El Pesa-nervios?
Yo trato de que en ellas haya todo lo que hay en la vida, tanto dolor como alegría; por ahí uno se vé más llevando a… es decir, cuando uno está alegre uno está alegre y listo, en cambio cuando uno está dolido o herido tiene más tendencia a escribir. Las canciones de la edad media solían tener letras muy tremendas en las que se morían todos los personajes, y cuando terminaban venía siempre un estribillo medio cómico para que todos en la taberna terminaran cantando felices.
¿Qué es la comida?
Supongo que la comida debería ser como un ritual en el cual uno come de una manera tranquila y piensa en la energía que tendrá o en los animales que mataron para que uno coma… o en el gran Dios que nos da el milagro de comer, pero yo en general siempre pienso que comer es perder el tiempo, por eso como muy rápido.
Habláme de Dios…
Es una pregunta que para mí es imposible de contestar. Por un lado porque lo que uno llegue a sentir acerca de Dios no se va a poder decir con palabras, y por otro porque a ciencia cierta no tengo la menor idea.
¿Qué te interesa conocer de los grupos que te gustan?
En general me interesa saber de sus vidas o de lo que piensan sobre la vida, pero no me interesan demasiado los detalles como saber si usan una guitarra tal o cual o si les gusta comer cereales o tomar cerveza.
¿Qué pensás sobre la vida?
Que es algo… que es un milagro que estemos acá. O sea, estamos acá pero en realidad podríamos no estar. Cada minuto que estamos acá es como, por más que la vida sea difícil, algo fantástico. Además supongo que la vida también consiste en tratar de avanzar a partir de lo que uno es y no terminar queriendo a los 50 años lo que uno quería cuando tenía 5, o no terminar sin aprender nada.
Hay gente que no aprende nada…
Sí, sobre todo ahora con la televisión y todas las cosas. La gente tiene cada vez menos oportunidades de estar junto a sí misma y cada vez sale menos. Si todo estuviera bien y no nos fueramos a morir, estaría muy bien entretenerse durante la eternidad y mirar televisión, pero en realidad nos vamos a morir y eso hace que uno tenga que ir conociéndose a sí mismo, porque supongo que cuando uno se muera va a verse enfrentado a cosas fuera de lo común, aunque sean gusanos o ángeles, no sé, pero es raro. Además el tiempo que tenemos es muy poco como para perderlo.
¿Qué hacés para que las pocas ganas de crecer que tiene la gente no te contagien?
No es que tengan pocas ganas, tampoco poca capacidad, es sencillamente que el hombre es una persona que se olvida todo el tiempo, yo también. Uno se olvida de todo, de qué está haciendo, de quién es, de para qué lo hace, y siempre termina comportándose por inercia; y más si uno está metido en un montón de cosas que lo llevan de acá para allá. Yo no creo que la gente no aprenda nada, todo el mundo aprende… o sea, ¿quién es el que más sabe? Yo por ahí no sé nada, por ahí lo único que tengo es la habilidad con las palabras. Creo que era Rilke el que decía que la gente va acumulando vida y montones de cosas, y esas cosas son las que después tienen que llegar al poeta y ponerlas en palabras. Pero no es que el poeta sepa más que los demás… yo no sé si soy poeta o no, en todo caso lo que yo creo que sería ser poeta es tener esa habilidad y ese don de poder tomar las cosas de la gente y hacer algo con eso.
Hablame de tu infancia…
Yo tengo un recuerdo en sí feliz de mi infancia, pero tal vez fue media extraña. Me acuerdo que era un niño demasiado lógico, todo lo quería resolver con la lógica. Tenía insomnio por las noches, ya cuando tenía 5 o 6 años, y pensaba que la única manera de dormirme era contarme los sueños que había tenido; entonces me empezaba a contar los sueños durante horas. Al final me terminaba durmiendo, supongo que por cansancio… pero me quedaba así, completamente tapado y pensaba que la sábana me protegería de cualquier asesino que llegara y que podría estar ahí, contándome historias toda mi vida, y en general los niños se imaginan que son grandes héroes. Yo siempre pensaba que me codeaba con los héroes, pero nunca me tomaba mucho como héroe.
¿Qué héroes se codeaban con vos?
Y… qué se yo… desde los superamigos hasta héroes desconocidos por el gran público.
¿Y cómo es que te aceptaban entre ellos?
Se daban cuenta de que yo, a pesar de no tener superpoderes, tenía alguna cualidad desconocida que hacía que ellos me aceptaran.
¿Fuiste a alguna reunión, o siempre telepáticamente?
¡No! ¡¡Pero yo no me lo creía realmente!! Era como que una parte de mí se lo contaba a la otra, pero no es que uno puede dividirse en partes y pensar que una está loca y la otra está sana, y que a una le gusta jugar al fútbol y a la otra no.
¿Qué opinás de esos grupos que cantan todo el tiempo como si fueran pequeños, de esa postura del anti-crecimiento?
Yo creo que está bien ser niño cuando se es niño y adulto cuando se es adulto. Cada cosa tiene su tiempo y si no uno se transforma en un viejo verde queriendo tener las mujeres que no tuvo cuando era chico. Yo no me voy a poner a decir si lo que hace la gente está bien o mal porque es una cuestión de cada uno, por ahí el problema es que muchas veces las personas tienen una adolescencia difícil y una juventud complicada; entonces piensan en la niñez como el paraíso perdido… y tal vez sea el paraíso perdido, pero bueno, se trata de seguir el camino que por ahí uno interrumpió cuando empezaron todos los problemas de la adolescencia. Uno tiene que dejar que su cuerpo cambie porque igual, aunque no lo quiera, uno va a cambiar. Se supone que los sabios siguen al destino y que los necios se dejan arrastrar por él, o sea, las cosas van de una manera que uno no puede controlar. Cuando uno tiene 25 y todavía cara de niño está todo bien con fingir ser niño, pero después se hace complicado, ya nadie te lo cree.
¿Qué pensás cuando ves un anciano?
Y… a veces uno tiene miedo de hacerse viejo, pero lo peor de todo es hacerse viejo sin haber hecho nada. Tratar de no levantarse a los 72 las mujeres que uno no tuvo a los 21.
¿Recordás el primer cassette que te compraste?
Me lo compré a los 5 años, era de Pipo Pescador. A los 13 años me encantaba el heavy metal, después a los 15 el blues, y quería formar una banda de blues.
Hablá de la variedad de caras de las personas…
Yo pensaba siempre que todas las personas estaban en el mundo para que algún día se lograran las combinaciones de todas las caras posibles. Entonces las miraba y trataba de recordarlas para que figuraran de extras en mis sueños.
¿Alguna llegó a convertirse en superhéroe?
¿Qué?
Si alguna de estas personas llegó a codearse con vos pero no como extra sino como superhéroe…
No, no, pero yo ahora te estoy hablando de otra edad… 15 o 16 años.
¿Hasta qué edad fue lo de la patología de los superhéroes?
Y… cuando era un niño… un momento…
LLEGA FLORENCIA (EX MATA VIOLETA, TAMBIEN CONOCIDA COMO FLOPA) Y SE SUMA AL REPORTAJE
F:¿Le contaste algo sobre Krisis?
P: Krisis era mi grupo de cuando tenía 9 años; eramos un vecino de mi misma edad y yo. Teníamos la guitarra que era del hermano mayor de él y nos sentabamos uno a cada extremo de la mesa y hacíamos una letra. Después agarrábamos la guitarra y como no sabíamos los acordes, tocábamos de cualquier manera y cantábamos.
¿Recordás alguna letra de Krisis?
P: La primer letra que escribí en mi vida era un tango y se llamaba Julia… el estribillo decía “Julia, ¿por qué me dejaste y me diste esta puntada tan certera al corazón?”.
F: Después había también cassettes de chistes…
P: Ah! En realidad antes de esto y de que le pusieramos el nombre Krisis (que lo sacamos de una revista soviética de cosmonautas que no sé de dónde había salido, soviética pero en castellano, esas de difusión comunista) grabamos dos cassettes. En uno contábamos anécdotas gauchezcas gritando todo el tiempo HUIJA y CANEJO, porque leíamos todo el tiempo Patoruzú. Después grabamos otro que se llamaba RUIDOS DE GUERRA, y eran todas cosas de matracas, ruidos de caballos, disparos y gritos como “HUY, ME MUERO!!!”.
¿Qué pasó con ese material? ¿Los fans de El Pesa-nervios pueden adquirirlo?
P: Primero lo tuvieron nuestros respectivos padres, pero creo que por miedo a que se los hicieramos escuchar otra vez los habrán desgrabado.
Seguramente tenés alguna perlilla escolar…
P: Cuando tenía 16 años hicimos un recital en mi colegio con un grupo que se llamaba Los Piscodélicos. Me acuerdo que antes de comenzar el recital leí la dedicatoria del libro EL ELIOGABALO de Artaud, en el cual dedicaba su obra a la anarquía y otras cosas. Todavía tengo la grabación en la cual yo digo eso y se escucha cerca del grabador una voz maquiavélica que dice… ah!!! La anarquía!!! (risas)
DORIAN (BATERISTA DEL GRUPO) TAMBIEN TIENE INQUIETUDES, Y MIENTRAS ACARICIA UN PERRO NOS DICE…
D: Como generalmente la gente es tan mierda, lo único inocente bueno son los animales, que no saben lo que es bueno y lo que es malo…
¿Y por qué hay perros policías?
D: Pero no son malos, los hacen malos.
P: Y bueno, lo mismo se podría decir de las personas…
D: Pero las personas pueden decidir por sí mismas, los perros no.
P: Hasta cierto punto.
D: Yo conozco gente que dice “voy a ser policía porque no te piden nada y encima te pagan”.
Pero quizás los bebés cuando nacien tienen la misma mentalidad que los perros, o sea, después se educan…
D: No, pero dicen lo psicólogos que apenas nacen es como que no son conscientes pero tienen que ir viendo como van a ser en el futuro, el carácter y todo eso.
Quizás los perros también sepan y puedan optar por ser policías o no… D: No sé si saben, no sé si es en blanco y negro o en color.
P: En cuantas dimensiones, qué programación… (risas)
F: Como los caballos, que ven para los costados, pero ¿cómo hacen para ver para adelante?
D: Es que si es por eso también tenés que decir… vos ves recto.
F: Pero el caballo es distinto, porque tiene los ojos de costado.
D: ¡Pero tiene un punto de unión!
P: ¡Bueno bueno, hacé una pregunta Gato!
¿Cuál es tu estación del año favorita?
P: Las quiero a todas por igual.
¿Cuál es tu color favorito?
P: Los quiero a todos por igual…
LUEGO DE DOS PREGUNTAS ABSOLUTAMENTE NEFASTAS, PABLO SE DEDICO A BRINDARME EN FORMA GRATUITA SU CURSO DE PERIODISMO PARA PRINCIPIANTES…
P: Vos tenés que buscar lo que les interesa a los lectores, tenés que atacar los puntos bajos diciendo cosas como…
F: ¿Es verdad tu reputación de homosexual?
P: ¡No!, eso por ejemplo no; eso no lo preguntés porque podés llegar a ligar una trompada, sobre todo porque sos periodista alternativo y no tenés poder. Si fueras de Clarín tendría que decirte simplemente no, pero no pongas lo de Clarín, a ver si todavía quedamos mal…
F: En realidad debería ser al revés, a los periodistas de revistas alternativas hay que contestarles bien y a los otros hay que contestarles mal.
P: Bueno, pero una cosa es contestarles mal y otra cosa es pegarles una trompada. Si Gato me dijera “¿es cierta tu reputación de homosexual?” yo por ahí no le pegaría porque ya lo conozco, en cambio si te lo pregunta uno de Clarín… lo negás y nada más.
F: Es verdad que te vieron en Michelangelo con… (risas)
P: Bueno bueno, volvamos a la parte seria…
¿Qué es el amor?
P: Bueno, hay una canción que dice así: “Aprendí cosas sobre el amor, acerca de cuán errado podés estar, de cuán hermoso podría ser todo si todo nos saliera mal al final, pero al final me doy cuenta de que pasé por el sueño y la compasión y aprendí a soportar la calma y la tormenta, pero todavía no sé nada del amor”, ahí terminó.
ESPACIO DE SILENCIO…
P: Bueno, dale. Hacé preguntas, vos tenés que ser una máquina de preguntar y yo una máquina de responder, entonces el reportaje será un éxito.
Habláme de tu infancia…
P: … largo de mi privacidad, maldito periodista amateur!!!
ESPACIO DE SILENCIO
P: Lo que pasa es que muchas veces en los reportajes a bandas les gusta decir cosas como “sí sí, ahora estamos a nivel competitivo y logrando no sé qué cosa” y decir todas cosas de una manera exitista. Yo tengo una tendencia a decir todo de manera derrotista, entonces prefiero no contestar esas preguntas… hasta que me las hagas (risas), o sea, muchas veces las bandas van y empiezan a decir “claro, porque ahora tenemos unas ideas muy interesantes para lograr un nuevo disco y el EP, un sonido realmente innovador dentro del panorama mundial”, y lo escuchás y decís que están haciendo a los Red Hot Chili Peppers.
Bueno Pablo ¿cómo está el poder en la Argentina en este momento?
P: Las cosas están mal pero siempre estuvieron mal, no es ninguna novedad.
Alguien dijo que la gente se queja de que está todo mal, pero si ves los edificios de la DGI, están superterminados, y les chorrea el mármol por todos lados, o sea que la verdadera violencia de las cosas está en la calle, a la vista de todos, y a lo mejor la gente no reacciona con eso…
P: Para mí los problemas son realmente muy muy serios y muy muy graves, y no creo que se pueda cambiar mucho porque el orden no es una cuestión de la Argentina, es una cuestión del mundo que está hecho de cierta manera en la que unos tienen todo y otros no tienen nada. Y es también una máquina que ya está en funcionamiento y que está basada en ciertas ideas como el dinero, la comodidad, el entretenimiento, la esclavitud y cosas así, encubiertas. Pero es una máquina que ya está andando como loca.
¿No se la va a poder parar?
P: No sé, Jello Biafra decía que un verdadero cambio no es estar frente a la tv y hacer zapping; no podés cambiar así. El mundo está cada vez más contaminado, o sea, no sé cuántos años quedarán. Ponéle, el agua está tan contaminada que ya solo se puede tomar el agua que hacen los del sistema, o sea que si vos ahora te querés hacer el loco y te vas a vivir a no sé donde vas a tener que tener una canilla y esto y aquello. Las cosas ya marchan de una manera y el cambio sería muy lento, sería un cambio de la gente y no sé si hay tiempo ni si se puede hacer. La verdad es que no soy muy optimista. Cuando era más chico estaba en el movimiento anarquista y cosas por el estilo, y hoy en día ya no veo las cosas de esa manera. Tal vez sea por un exceso de política en ese tiempo, pero ahora no lo veo muy así, no veo las cosas de una manera política… bah, todo es político en sí, pero no es una cuestión de que se muera Menem o Cavallo… o que se muera… ¿cómo se llama el presidente de los EE.UU.?… Clinton!, no es una cuestión de que se muera uno o el otro. Las cosas ya están armadas de una manera y si vos querés detener todo eso y, si pudieras hacerlo, imagináte que hubiera una revolución salvaje y que murieran, sería algo terrible. Además no se puede hacer… no sería una cuestión tan sencilla…
¿Y por dónde vendría la mano? ¿Qué bajen los extraterrestres?
P: No, yo en realidad no lo sé. Pienso que lo más probable es que dentro de 100 o 200 años no quede nada.
¿La televisión es un medio decisivo?
P: Yo nunca miro televisión, me parece que hace daño al cerebro, pero hay gente que dice que le gusta relajarse y ver televisión.
¿Y entonces de dónde sacaste a los superamigos?
P: Bueno, cuando era niño miraba televisión, pero en esa época no tenía una libertad de pensamiento como para… o sea, en ese momento quería lo que todo niño, entretenimiento, y cuanto más entretenimiento mejor.
¿Qué quiere decir? ¿Qué los superamigos se convirtieron en parte del poder político y por eso ya no soñás más con ellos? ¿Qué pasa si a tus 25 años soñás con ellos nuevamente?
P: De hecho a veces me sucede que tengo los mismos sueños que tenía antes, pero el problema es que ya sé que los tuve y los voy viendo y digo “¡ah!, ¡ahora va a pasar tal cosa!”. Y sé todo lo que va a pasar. El problema viene cuando empiezo a dudar. Hay un momento en el que dudás y las cosas comienzan a ponerse… es como cuando vos sabés que vas a dar un paso en el agua y que cuando lo hagas el agua va a empezar a hacer círculos alrededor de tu pié, pero vos tenés miedo de que antes de que des el paso el agua empiece a hacer el círculo. Es un miedo así, a no llegar a tiempo. Tambiéntuve otro sueño cuando era chico en el que venía un león a mi casa y empezaba a comérsela toda. El tipo se comía las paredes, todo… y con mi familia nos ibamos refugiando en una habitación cada vez más lejana, y al final estábamos en una y no podíamos escapar. Entonces yo agarraba una espada y lo mataba. Cuando tenía 16 años volví a soñar lo mismo pero no estaba mi familia, sino que estaba rodeado por un montón de gente del ambiente del rock, y llegaba el león y se empezaba a comer la casa… y salían todos corriendo, salvo uno que estaba borracho… y el león se lo comía y ¡¡lo despedazaba!!! Y todos estábamos muy asustados. Venía gente de todo el mundo a refugiarse en esa habitación, que era la única que quedaba porque el león se estaba comiendo todo el mundo y nadie sabía qué hacer, y yo me acordaba y decía “yo ya tuve este sueño, hay una manera de solucionar esto, algo que se pueda hacer”, pero no se me ocurría. O sea, no se me ocurría agarrar una espada y matar al león; yo pensaba un discurso lógico por medio del cual ir al león y decirle “está mal lo que usted está haciendo (risas), no se puede estar comiendo las casas de la gente”… quería hacer algo así pero no tenía sentido, porque cuando tenés un león ahí lo único que podés hacer es matarlo o escaparte, pero no ir a convencerlo de que no sea un león. Después venía mi padre pero era un fantasma (mi papá no está muerto pero igual era un fantasma)… y venía y me daba enseñanzas que no me había dado nunca. Y yo trataba de entenderlas y venía toda la gente del rock y se reían y decían pavadas, y no dejaban que yo escucháse a mi papá. O sea, mi padre me estaba dando consejos acerca de cómo comportarse en la vida o de cómo era la vida, y estos venían y se reían… y no es que fueran locos, sino que eran decididamente bobos. Lo peor es que después tuve una novia que tuvo el mismo sueño, y el león venía y ella lo agarraba y se transformaba en un gatito.
¿Esto es cierto? (risas)
P: Sí, es que yo tengo 5 sueños por noche más o menos.
ESPACIO DE SILENCIO
P: Ponéle, ahora nos estamos divirtiendo, pero en otro momento no vamos a estar más acá, y todo esto va a desaparecer. Yo era chico y eso me parecía imposible, pensaba que había gente de otro planeta mirándonos. Estaban mirando tv todo el día… entonces imagináte una familia de extraterrestres que está cenando eternamente viendo tv, mirándonos a nosotros. Yo creía que cada familia de extraterrestres tenía asignada una familia terrícola. Había programas entretenidos y programas que aburrían, pero yo consideraba que hacía un programa entretenido (risas). Cuando se me ocurría un chiste gracioso lo contaba mirando el techo, pensando que le causaría alegría a la familia extraterrestre (risas). Tenía 5 años.
¿No tuviste oportunidad de conocerlos?
P: No, es que era algo muy teórico, lo pensaba sencillamente porque estaba cerca de descubrir que uno un día se muere.
¿Fuiste a un psicólogo alguna vez?
P: En realidad no tiene importancia la historia. Es graciosa, pero la cuestión es que es difícil vivir aún sin que haya algo más que el instante, que es una de las cosas que hace que el mundo esté llegando a su destrucción. No hay nada que haga que uno se sienta seguro, que las cosas puedan durar. Cada vez hay una razón distinta. No podés decir “yo escribo porque quiero conquistar a esa señorita” o “porque me siento muy contento”. De todos modos yo empecé a escribir de muy chico y nunca dejé de hacerlo. Es también lo que me pasaba cuando estaba con los héroes en mis sueños. Creía que era un héroe, pero yo era el que contaba la historia, no pensaba que yo era el que tomaba una ciudad, sino que era el que contaba como lo hacían. O sea que por ahí, de golpe, pasaba alguien por delante de mí y le daba un golpe. O cuando iban a matar (risas) a uno de los capitanes. Nunca fui un héroe, siempre lo sentí así. A mi lo que me pasa es algo muy extraño, ahora no tanto, pero hace muchos años yo soñaba con Bs.As., todos mis sueños pasaban por acá, pero cada zona tenía como una personalidad, un matiz muy particular, un estado de ánimo. Las calles daban miles de vueltas. Me acuerdo que Barrancas era una barranca de diez cuadras llenas de mendigos, y cada vez que tenía que atravesarla lo hacía corriendo, porque los mendigos se lanzaban sobre mí y trataban de robarme (risas).
¿Nunca tuviste un sueño normal?
P: A veces lo peor son los sueños agradables, porque te despertás y decís “¡uh! ¡Era un sueño!” y hacés una canción o un cuento… o nada, pero decís “ya pasó”. En cambio cuando es un sueño fantástico en el que una chica está con vos cuando te despertás es un bajón…
Bueno, pero con el león en tu casa te despertás agitado…
P: Depende, cuando matás al león te despertás contento, en cambio cuando dejás que el león haga trizas todo y tratás de convencerlo de que sea caritativo (risas)…
¿Cuál es el león de la realidad?
P: y… son muchos. Demasiados los leones que amenazan nuestra casa.
ESPACIO DE SILENCIO
P: Preguntáme cosas banales, porque sino la gente va a decir tonterías, como aquel popular “que va a ser famoso si vive a la vuelta de mi casa”. Una vez estuve en una radio muy famosa y a un tipo le hacían preguntas como “¿es bueno este disco de James Brown?”, y él decía “sí, lo escuché cuando tenía tres años”, y todo el mundo decía “¡¡¡uh!!!, ¡¡este guitarrista escuchó a James Brown cuando tenía 3 años, caramba!!”. Entonces se complica porque la fama y la presión de los demás se meterán a cada rato en las preguntas que me hagas. Por ahí sería mejor que pusieras el reportaje como que encontraste a alguien por la calle y se lo hiciste, entonces todos van a decir “¡¡¡éste está loco!!!” o “¡¡¡mirá éste las cosas que dice!!!”. Algo interesante podría ser que hay letras que las soñé y cuando me desperté las anoté. Por ahí tu creación a partir de una casualidad tan grande como es un sueño se va más allá de lo que vos querías, creo que de eso se trata el crear algo, como el famoso caso de los escritores perseguidos por sus personajes. Llega un momento en el que tenés que ir detrás de tus creacionies como si fueras una especie de cronista. El mayor problema que tengo cuando me pongo a escribir una novela es que pierdo el control de los personajes. Ellos van a donde ellos quieren y terminan haciendo cosas absurdas. Mi última novela se trata de…
EN ESTE MOMENTO PABLO ME CUENTA SOBRE UNA NOVELA MUY ABURRIDA QUE TRANSCURRE EN EL DESIERTO…
¿Se trata de Sheik, la novela del 13?
P: Lo que acabás de decir es una auténtica pelotudez, te merecés esto (sopapo mal colocado para suerte del amateur cronista y de sus futuras novias). Ahí está la diferencia. Si vos me conocieras a mí porque yo fuera amigo de los grandes, o no te hubiera dado pié a que me hagas bromas, yo te hubiera contado esto y vos dirías “¡caramba!, ¡¡¡que novela tan interesante!!!”. En cambio en este momento te permitís hacerme ese chiste. Realmente me siento muy decepcionado (risas) creo que esto ha sido todo.
Formación de El Pesa-nervios
Karate-slam: bajo
Dorian Mori: batería y percusión
Pablo Krantz (visitá su sitio web) : guitarra y voz
Invitados
Titán Aguer: acordeón
Carolina: teclados
Luis Moeawsky: guitarra y coros
Fidel Araujo: hombre-caballo y coros
escuchá > NINGUN CAMINO A CASA
Grabado en estudios 440, Cap. Fed. en 1995
Batería: Tati Carreras
Bajo y coros: Luis Morawski
Acordeón y coros: Titán Aguer
Guitarra y voz: Pablo Krantz
Compuesto por Pablo Krantz
Letras
Ningún camino a casa
Bueno, he estado demasiado tiempo
Caminando desnudo por la crueldad de la noche.
Y veo que todos están embarcados
en una guerra de sexos.
Sé que no soy ningún santo
pero siento que así
no hay ningún ningún ningún camino a casa.
Así que acá estamos, mi amigo,
y al final, ¿qué somos sino el mismo par de tontos?
aún no entendimos nada en tantos años.
¿Dónde está ahora una mujer que pueda llevarme a casa?
Sé que no soy ningún santo…
Fue hace tanto tiempo, hace tanto tiempo, María,
¿Adónde, adónde, adónde estarás ahora?
Yo estaba tan loco, estaba tan ciego,
perdido en los remolinos de mi cabeza.
Sé que…
Ay, María, María, tus ojos eran ojos eran ojos de buey
por los que se asomaba el azul del mar.
Y yo no tengo caballo para irme del pueblo,
no, no tengo ni pala ni caja para enterrar tu recuerdo.
Bueno, he estado demasiado tiempo
Caminando desnudo por la crueldad de la noche.
Y veo que todos están embarcados
en una guerra de sexos.
Sé que no soy ningún santo
pero siento que así
no hay ningún ningún ningún camino a casa.
Así que acá estamos, mi amigo,
y al final, ¿qué somos sino el mismo par de tontos?
aún no entendimos nada en tantos años.
¿Dónde está ahora una mujer que pueda llevarme a casa?
Sé que no soy ningún santo…
Fue hace tanto tiempo, hace tanto tiempo, María,
¿Adónde, adónde, adónde estarás ahora?
Yo estaba tan loco, estaba tan ciego,
perdido en los remolinos de mi cabeza.
Sé que…
Ay, María, María, tus ojos eran ojos eran ojos de buey
por los que se asomaba el azul del mar.
Y yo no tengo caballo para irme del pueblo,
no, no tengo ni pala ni caja para enterrar tu recuerdo.
ROCK DEL MILLON
Tenía dieciocho cuando mi viejo me hechó tenía dieciocho cuando mi viejo me hechó. El viento golpeaba las ventanas como un cobrador. Mi vieja lloraba en la habitación. Y él medijo “no vuelvas hasta que no tengas un millón”. Yo estaba en la estación esperando el tren. Mi chica lloraba, yo me iba pa’ no volver. Hermano, se me partía el corazón. Pero en su voz tan dulce sólo escuché esa voz. Que me decía “no vuelvas hasta que no tengas un millón”. No vuelvas. No vuelvas. No, no vuelvas más, vago de mierda. No vuelvas, ya no vuelvas más. Yo te digo que no vuelvas hasta que no tengas una posición social. Voy a crear un ejército de limpiadores de ventanas. Voy a meterme en una secta y predicar de la mañana a la noche. Voy a hacerme político o militar. No voy a parar un segundo de mentir, robar y estafar. Y puede que así yo obtenga lo que ellos llaman una posición social. Y a veces cuando la noche se derrama sobre la dársena sur. Y el humo de las fábricas no deja pasar la luz. Y una chica extraña me acaricia la piel. Y siento que aún palpita y grita y se agita mi pobre corazón. Aún lo escucho decirme que no vuelva hasta que no tenga un millón. |
HISTORIA DEL HOMBRE-CABALLO
Es de noche y los niños buenos se van a la cama. Mamá los bendice y así el Angel los cuidará. Pueda la frazada cubrirlos de balas y traiciones; oh, es una noche azul, la Osa Mayor sonríe y todo está en paz. Ni un sonido quiebra el cristal del silencio, Ya es hora de inventar historias en secreto. Y un largo jardín se extiende bajo un cielo hecho de nieve, y hay una mansión oscura a la que no hay que acercarse, les han dicho. Y mientras el sueño va tejiendo sus nubes doradas, se escucha algo a lo lejos, algo así como un relincho… Uuuuuuuuuuuaaaaaaaaaahhhhhhhhh!!!!!!!! Un hombre se volvió loco y creyó ser un caballo; el caballo enloqueció y creyó ser hombre. La gente creyó que se había curado cuando estaba en verdad dos veces loco. Arrreeee!!!! Y al despertar los niños cantan caballito, caballito regresa a casa. Y al despertar los niños cantan Caballo, despierta y vuelve a casa. Y vuelve a casa! Uuuuuaaaahhhh!! Y vuelve a casa! |
FUIMOS
Fuimos, fuimos bordeando la ruta, ahí donde todo puede pasar. Sin temer a las sombras de las espigas crujiendo y oscilando en la noche violeta. Confundiendo su olor a oro seco con el sabor de las uvas amargas que comimos lentamente. Hablando del pasado. |